Bajo el entendido que la economía es en esencia una ciencia social, es decir donde el principio y fin es el ser humano, es primordial analizar de forma detallada las relaciones de los individuos dentro del entorno económico, relaciones sintetizadas en actividades como lo son producción, distribución y consumo de bienes y servicios, todo concebido dentro del mercado, el cual genera elementos endógenos y exógenos que lo llevan a crear desajustes que deben ser corregidos, es entonces donde la comprensión de la ciencia económica, enlazada y contrastada con la realidad bajo una visión lógica, posibilita no sólo anticiparse al constante movimiento de  los distintos mercados sino que, en adición, permite concebir escenarios futuros y, sobre esa base dirigir la toma de decisiones de acuerdo con las metas trazadas desde una firma en particular hasta la propia dirección de política económica, todo orientado siempre a posibilitar al profesional el poder ofrecer alternativas de crecimiento y desarrollo económico y social, desde una  unidad mínima hasta los conglomerados nacionales y mundiales de la economía, donde el único fin sean las personas.